NÚMERO DE VISITAS

viernes, 22 de julio de 2016

MADRE

6 letras lleva el ángel que me resguardó en su vientre;
38 semanas en las que su dulce voz me acompañó en cada instante.
La mujer que me enseñó a ser fuerte.
Con amor y cuidado sus manos guiaron mis caminos, caídas tuve, su apoyo nunca me falto.
Cuando mis miedos arrinconaban a mi corazón ella nunca me falló;
Permanecía a mi lado sin esperar nada a cambio.
La mujer que me enseñó a persistir y perseverar.
Cuando sus besos mágicos hacían desaparecer las heridas invisibles de la piel.
6 letras lleva el ángel que me resguardó en su vientre.

La mujer que me enseñó a ser valiente.

viernes, 15 de julio de 2016

VUELVE

Es de madrugada y veo lágrimas caer del cielo;
Sentía mi alma desnuda y quebrantada,
Su ausencia marcaba mi dolor, perdí a una amiga, sí, a una amiga querida.
Espero su llamada, un mensaje que me aliente a pensar que regresó;
El buzón de voz esta vacío.
El fuego procedente de su pelo, cobrizo el fulgor que resplandecía en sus cabellos.
A menudo ella decide habitar en mis sueños;
Me habla;
Y yo no respondo;
Me llora;
Pero yo no la escucho.
Por favor deseo que regreses;
Tengo cosas que contarte;
Volver a abrazarte.
Recuerda tu vida antes de separarte de nosotros;
Recuerda las risas;
Los instantes compartidos;
Me rompe escuchar que te alejas;
Te amamos y él te ama.
Aunque no te lo creas ya está dicha la verdad.
¿Realmente hallas la felicidad en los rincones de tu suspirar?
A menudo decides habitar mis sueños;
Me hablas;
Y yo no puedo responderte;
Me lloras;
Y yo no puedo escucharte.
Tengo cosas que contarte;
Volver a abrazarte.
Tu huella aquí se quedó;
No nos dejes.
Te amamos y deseamos tu vuelta, volverás a sentir el amor que un día te faltó.
Aquí te esperaremos.

Y aunque no te lo creas ya está dicha toda la verdad.


sábado, 9 de julio de 2016

ÁNGELES DE PORCELANA

Como toda niña soñadora;
En la infancia acariciaba en mi mente el deseo de bailar ballet;
Una danza diferente a cualquier otra en la que la armonía y elegancia de cada paso, cada salto, la majestuosa ola de cisnes puros parecían surcar el cielo.
Entregados a cada gesto, cada giro.
Rostros angelicales;
Perfectos rostros de porcelana intacta.
La belleza de las musas en apenas unos ojos entre abiertos haciendo vibrar por su cuerpo la estática emocionada de transformarse en puros sentimientos.
Deseé ser como aquellas musas de rostro angelical que con dedicación y dolor desde la coronilla hasta la punta de los pies hacían magia con sólo unos pasos de su enigmática danza.
Mi deseo de ser ángel como ellas sigue arraigado más puede ser demasiado tarde, las ansias de un sueño perdido;

La tristeza de la ausencia, de aquél sueño que inocente como un niño abrazó mis ilusiones.


           

                          

INFANCIA

Dolor que azota como un látigo directo al corazón;
Oh rabiosas lágrimas que desgarran mis pupilas,
Dichosa la sonrisa que antaño cruzaba por mi boca;
Raspazos en las rodillas, el mayor dolor y preocupación que una criatura podía tener en su niñez, sin darse cuenta que al crecer el dolor emocional superaría en gran manera a la infancia que fugazmente se marchaba. ¡Vuelve! Grito una y otra vez.
Rabia contenida amenaza salir por mi lengua desatada.

Irritante lo que mis oídos escuchan repitiendo la misma melancólica sinfonía cantadas en las partituras de mi alma.